El tren de la bruja, los autos de choque o los carruseles no cesan de girar en el pabellón 5. En este espacio, las familias que visitan la 80 edición de la Feria General encuentran un verdadero aliado para la conciliación y la fiesta de los más pequeños durante estos días en los que no hay clase. Todo ello, además, con el aliciente de que cada uno de los viajes cuesta poco más de un euro, por lo que el éxito está asegurado.
Junto a estas atracciones como los toros que giran, la churrería, las casetas de tiro y puntería o las camas elásticas hacen que los chavales disfruten del ferial con las condiciones más favorables posibles, como son estar ubicadas dentro un recinto cerrado sin alteraciones climatológicas y que cuenta con todas las medidas higiénicas y sanitarias.
Una de las notas principales de esta edición del salón multisectorial es que está dedicada especialmente para el disfrute de los más pequeños de la casa, con propuestas tan diversas y atractivas que van desde el taller de chucherías o el de pintura del Pato Quino, pasando por los torneos de basket que organiza Casademont Baloncesto Zaragoza o el rocódromo del pabellón 3, donde están ubicados los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y que se ha convertido, a lo largo de los años, en uno de los lugares favoritos de los visitantes, gracias a que convierten esta zona en un verdadero campamento militar. Las pistas de obstáculos, el simulador, el carro de combate o las exhibiciones de adiestramiento de perros también son algunas de las actividades que más llaman la atención a los jóvenes.
Las actividades deportivas también tienen un lugar importante en la agenda del certamen, que está abierto al público entre las 11.30 y las 20.30 horas, ininterrumpidamente, hasta el próximo domingo, 17 de octubre. Para aquellos que quieran dejar el coche en casa, Feria de Zaragoza pone a disposición de los visitantes un servicio de bus lanzadera, que une el centro de la ciudad con el recinto ferial durante todo el día.