Un espacio singular.
De la mano del Palacio de Congresos, Zaragoza ha conseguido irrumpir con fuerza en el panorama congresual y de turismo empresarial en España. Con una oferta novedosa, que va acompañada por un recinto competitivo, moderno y polivalente. La capital aragonesa ofrece más por menos.
El recinto ha logrado posicionarse en el mercado gracias a una excelente ubicación, grandes posibilidades de negocio y una buena oferta de servicios de calidad.
El edificio cuenta con tres grandes áreas: Zona de exposición, Vestíbulo y Salas de Reuniones y el Auditorio; este último con capacidad para 1.400 personas. Así, el hall central dispone de 2.000 metros cuadrados y un altura de más de veinte metros que, con la entrada de luz natural, permite ofrecer un espacio diáfano y con excelentes oportunidades. En total, el Palacio de Congresos de Zaragoza tiene una superficie de 22.000 metros cuadrados.
Por todo ello, las características de estas instalaciones le otorgan unas posibilidades inmejorables para la celebración de actividades y eventos de toda índole.
Una de las singularidades con las que cuenta este edificio es su original estructura. El techo marcado por unas aristas puntiagudas aporta ingeniosas formas que impregnan de carácter al Palacio de Congresos. Las 19 salas -con capacidades que se encuentran entre 30 y 300 personas- y un área multiusos -de 2.000 metros de superficie- facilitan la realización de cualquier tipo de actividad, incluso de manera simultánea.
El gran atractivo que genera este edificio tan singular responde a las necesidades más exigentes. Cualquier tipo de requisito puede ser satisfecho en este lugar, gracias a su polivalencia y multitud de posibilidades. El Palacio de Congresos es un recinto concebido para el éxito de cualquier tipo de evento.